La Hermosa Libertad del Quebrantado

Acabo de comprobar que he subestimado la importancia del espejo, y no me refiero al espejo frente al cual nos arreglamos cada mañana, sino al espejo en el cual reflejamos el perfil de nuestro ser interior; de nuestro corazón. Nuestro "espejo espiritual". Ese espejo que Dios usa para llevarnos al quebrantamiento y formar en nosotros un espíritu humilde y contrito. 

Pero ¿qué significa "quebrantamiento"?

Según el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española significa:

1.-Machacar o reducir una cosa sólida a fragmentos relativamente pequeños, pero sin triturarla.

2.-Forzar, romper, venciendo una dificultad, impedimento o estorbo que embaraza para la libertad.

3.-Experimentar algún malestar a causa de un golpe, una caída.

..."romper, venciendo una dificultad, impedimento o estorbo que embaraza para la libertad". ¡Cierto! el quebrantamiento trae libertad a nuestras vidas, pues no podemos ser libres sino cuando nos rendimos a Dios reconociendo que dependemos de ÉL. Pero desafortunadamente a veces el orgullo es demasidao, y tenemos un corazón tan endurecido que precisamos de un golpe muy fuerte, de una caída desde lo alto,  para reconocer esa dependencia de Dios. ("Antes del quebrantamiento es la soberbia, Y antes de la caída la altivez de espíritu". Prov. 16:18). 

Este "espejo espiritual" del que te hablo nos muestra esos puntos o "estorbos" que desagradan a Dios y que debemos cambiar. Con frecuencia está dentro de nuestro hogar, en nuestro salón de clases o en nuestra oficina. ¿Que nunca lo has visto? lo mismo pensaba yo. Te invito a que lo pienses de nuevo. Piensa en esa persona que te cae mal, con la que evitas toparte o apenas se acerca a tí y comienzas a sudar. Bien, ahora búscate en ella. ¿Ya te viste? ¿Cuántas características similares tienen?... una pista:mira las que más te desagradan...¿Ya las viste? Exacto, ahí están. ("Mejor es humillar el espíritu con los humildes, que repartir despojos con los soberbios" Prov. 16:19).

Sí, el proceso duele, y mucho. Pero es necesario para ser renovado por completo. Así como el oro debe pasar por el fuego para ser refinado, tú y yo debemos pasar por ese hermoso proceso de quebrantamiento para ser totalmente renovados en Cristo y gozar de Su libertad. Solo siendo vasos vacíos, derramados delante Dios, podremos ser posteriormente llenos de su Santo Espíritu hasta que sobreabunde, y poder decir con gozo "Mi copa está rebozando".

"Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón, y salva a los contritos de espíritu".

Salmo 34:18. 

"Porque así dijo el Alto y Sublime, el que habita la eternidad, y cuyo nombre es el Santo: Yo habito en la altura y en la santidad, y con el quebrantado y humilde de espíritu, para hacer vivir el espíritu de los humildes, y para vivificar el corazón de los quebrantados".

Isaías 57:15